Lic. Kattya Gonzalez, Diputada Nacional de la República del Paraguay

Necesitamos una reflexión importante sobre lo que significa una mirada de género en la labor legislativa. Las mujeres aún tenemos muchas dificultades y obstáculos para participar en el Congreso de la República de Paraguay, en ese sentido aún vivimos un atraso en la región en el ámbito de la representación femenina y sigue siendo una práctica pendiente. Esto se debe al contexto de ser el último país en la región en legitimar el voto femenino, por lo que la mirada que tenemos sobre la representación femenina en política en igualdad de condiciones es crítica.
Existen cuatro mecanismos que operan que operan como cerrojo de exclusión de los espacios públicos, entre ellos se encuentran: mayores exigencias de ingreso y permanencia en el espacio parlamentario, descalificaciones y agresiones verbales (sobre todo en el ámbito sexual, aspecto físico y privado), división sexual del trabajo y segregación vertical y horizontal.
En la etapa de la pandemia adquirimos una deuda de 1.600 millones de dólares para obras, infraestructura, rutas. En ese sentido quedamos fuera de la agenda y sufrimos un aumento de la violencia. La pobreza y la extrema pobreza tiene rostro de mujer y de niño, esa es nuestra deuda. Sin embargo, no encontramos en la agenda todavía un plan para financiar políticas para cubrir estas necesidades.
AVANCES
Se encuentra en estudio una ley para prevenir, sancionar y erradicar la violencia política contra las mujeres por razones de género, es importante entender que existe un texto normativo que condena la violencia contra la mujer, sin embargo, el texto no tiene sanciones efectivas y hace que la ley sea letra muerta. Por ello, esta nueva ley incorpora una matriz que apunta una sanción contra el agresor. Necesitamos más apoyo, más visibilización, la misma que se construye en estos espacios donde podemos abordar los desafíos que nos toca emprender en materia política.